Comienza San Isidro. Durante más de 30 días la Monumental de las Ventas lucirá abarrotadas sus localidades de barrera, tendido, grada y andanada. Habrá quien ocupe su asiento como acto social y lucimiento personal, quien acuda a pasar la tarde y tomarse un par de cubatas con las entradas que le ha regalado el jefe y habrá quien esté contando los minutos y los segundos que faltan para cruzar la esplanada de Las Ventas con ese nudo de esperanzas en la barriga dispuestos a no perderse ni un solo detalle de lo que ocurra tras sus arcos mozárabes. A estos últimos que bajan por Alcalá o salen del metro en Ventas, se les denomina aficionados, especie en peligro de extinción y cuyos gustos y exigencias define perfectamente D. Enrique Martín en su Blog TOROSGRADA6.
Los aficionados venteños saben muy bien lo que quieren ver en su plaza y se resume en una palabra, INTEGRIDAD. Integridad en los empresarios, integridad en el ganado, integridad de los toreros e integridad del equipo gubernativo. La palabra integridad a parte de significar que no le falta ninguna de sus partes a algo... también significa, pureza, firmeza, rectitud. La afición estará cada tarde al acecho para recordar esos valores a quienes se olviden de ellos, de momento a los únicos que se le ha podido reprochar su comportamiento es a los señores empresarios, "Los Choperita" responsables máximos o mínimos según se mire de la confección de los carteles, unos carteles faltos de criterio de buen aficionado, demasiados toreros con cualidades, ganas y necesidad de triunfo se estrellarán contra mulos descastados y sin posibilidades de lucimiento. Las "figuras" todas juntas, para no mezclarse con la clase media y que no se note la poca distancia que existe entre toreros que matan 60 festivales de luces y toreros que matan 10 corridas de toros durante una temporada y para que no comparen los terrenos que pisan estos y los que merodean los otros. Es incomprensible la ausencia del mejor torero a caballo, Pablo Hermoso de Mendoza o la de Frascuelo y la presencia injustificable de algunos otros como El Capea, aunque cortase una orejita el año pasado.
A estas alturas ya no hay vuelta atras, por tanto suerte para todos, sobre todo para la afición.Los aficionados venteños saben muy bien lo que quieren ver en su plaza y se resume en una palabra, INTEGRIDAD. Integridad en los empresarios, integridad en el ganado, integridad de los toreros e integridad del equipo gubernativo. La palabra integridad a parte de significar que no le falta ninguna de sus partes a algo... también significa, pureza, firmeza, rectitud. La afición estará cada tarde al acecho para recordar esos valores a quienes se olviden de ellos, de momento a los únicos que se le ha podido reprochar su comportamiento es a los señores empresarios, "Los Choperita" responsables máximos o mínimos según se mire de la confección de los carteles, unos carteles faltos de criterio de buen aficionado, demasiados toreros con cualidades, ganas y necesidad de triunfo se estrellarán contra mulos descastados y sin posibilidades de lucimiento. Las "figuras" todas juntas, para no mezclarse con la clase media y que no se note la poca distancia que existe entre toreros que matan 60 festivales de luces y toreros que matan 10 corridas de toros durante una temporada y para que no comparen los terrenos que pisan estos y los que merodean los otros. Es incomprensible la ausencia del mejor torero a caballo, Pablo Hermoso de Mendoza o la de Frascuelo y la presencia injustificable de algunos otros como El Capea, aunque cortase una orejita el año pasado.
César Palacios, ex-arenero de Las Ventas y dibujante, tomando apuntes.
Y a nosotros un año más sin ponernos. Será porque no hemos tentado este invierno...
ResponderEliminarEl año que viene debutamos con lo de monteviejo. Hay que levantar esa ganadería, sobre todo si va a ser tuya.