EL TIMO DEL MUNDIAL

Recuerdo que un año de mundial de fútbol como éste me dediqué a recorrer el campo charro haciéndome pasar, junto a unos amigos, por empresarios taurinos interesados en celebrar un festejo por el mes de junio. Nos presentábamos en la finca con algún novillero o torero de confianza, tras haber contactado telefónicamente con el ganadero o el mayoral y explicarle ligeramente nuestras intenciones. El ganadero en cuestión, nos daba una vuelta por su finca enseñándonos el ganado que tenía disponible para el hipotético festejo y cuando nos preguntaba por la fecha de celebración, apelábamos al calendario del Mundial.

-Verá usted, ej que... lo quisiéramos celebrar el 9 de junio día de La Rioja, pero ya sabe que está el Mundial y figúrese usted si lo programamos para esa fecha y resulta que juega España.
-Ufff, una hecatombe.
-Pues eso mismo pensamos nosotros, por eso estamos esperando a que se defina el calendario de los partidos, eso sí, su novillada nos gusta mucho y cuando tengamos más avanzadas las cosas no se preocupe que nos pondremos en contacto con usted.

Después de la larga cambiada a la que sometíamos al señor ganadero o en su defecto al mayoral, nos despedíamos soltando como quien no quiere la cosa la pregunta clave y en definitiva el objetivo principal de nuestro "engaño".

-Por cierto, aquí nuestro paisano, torero de alternativa será uno de los componentes del cartel, si va usted a celebrar un tentadero en fechas recientes le pediríamos por favor que tuviese a bien echale unas vacas al chaval, ya sabe, pa que se vaya haciendo a la embestida de su ganado.
-Cómo no, lo que haga falta, déme su móvil que yo le aviso, y ustedes están invitados también, al tentadero y a comer.
-Hecho, nosotros ponemos el vino.

El "timo" del festejo del mundial se perpetró en varias ganaderías de Salamanca y alguna de la zona Centro con parecidos resultados. La excusa del "maldito" mundial sirvió para que algún matador ya retirado gozase de algún tentadero en épocas de "vacas flacas" y a nosotros para pasearnos por fincas, ver tentaderos y toros en el campo.

Ruego que si alguien al leer esto se siente "estafado" por mi persona, me sepa disculpar ya que en el fondo tampoco es que llegásemos a mentir del todo, porque en el año 1997 y 1999 ya habíamos organizado festivales benéficos en la plaza de nuestra ciudad con bastante éxito, pero ya se sabe. Jugando la roja, quién se arriesga a montar un festejo.