viernes, 21 de octubre de 2011

AROMA A CHENEL

Desprende aroma a Chenel
este otoño macabro e incierto,
aroma a torería añeja,
macerada por el tiempo
y los rojos ladrillos de Las Ventas.

Chenel es oro al natural
y bronce milenario al trincherazo.
Chenel es golondrina que gobierna los tendidos
que no es capaz de posarse en la arena por respeto.
Respeto a la vida, respeto a la muerte,
respeto al toro y al torero.

Chenel es brisa de agosto y vendaval de primavera,
Chenel son las querencias y las contraquerencias,
el patio de cuadrillas y el del desolladero.
Chenel son dos cigarros antes del paseíllo,
con la montera calada y liado el capote de paseo.

Sueña despierto Chenel
en lo alto del tendido,
que el toro blanco de Osborne,
ese de nombre "Atrevido",
vuelva a salir por chiqueros,
como aquellos San Isidros
en los que se paró el tiempo
y alborotó los sentidos,
ahuyentando para siempre
pensamientos negativos.
Chenel agarra el capote,
sale al tercio decidido,
lo acaricia, lo somete
y lo torea de vicio,
pero esta vez no lo pincha
consumando el sacrificio.

Sueña Chenel que pasea
a hombros de la eternidad.
Chenel y su tauromaquia,
Chenel y su eternidad.
La eternidad de su aroma,
su muleta, su verdad,
su mechón su torería,
su voz ronca, su citar,
su vestido lila y oro,
su pausado caminar.

Desprende aroma a Chenel,
este otoño desalmado.
Aroma de fuego y paz,
de corazones helados,
de tendidos que oscurecen,
de toreros olvidados,
de luces que dan mucha sombra
aunque se estén apagando.

miércoles, 12 de octubre de 2011

LAS LÁGRIMAS DE ABELLÁN


He de reconocer que nunca fue santo de mi devoción, aunque en su etapa de novillero me llegase a ilusionar por su bisoñez y atrevimiento, ganó el Zapato de Oro de Arnedo en 1997, y en los primeros años de matador me agradase por su entrega y por su afán de subirse a toda costa al tren del éxito. Lo consiguió Miguel Abellán más pronto que tarde, logrando abrir la Puerta Grande de Las Ventas un 2 de junio del año 2000 en su segundo año de alternativa. El de Usera se estaba convirtiendo en indispensable en las todas ferias importantes de España, Francia y América y estaba apoderado por la Casa Chopera una garantía de éxito para el devenir de su carrera. Pero hubo circunstancias en la trayectoria de Miguel Abellán que hicieron que cuando se encontraba en la cúspide de su carrera, gozando del reconocimiento del público y de la prensa y toreando un número considerable de festejos a lo largo de la temporada, ésta se viese frenada, no en seco pero sí considerablemente. La Casa Chopera dejó de apoderarlo y de torear unas ochenta corridas, pasó a anunciarse más o menos la mitad en las sucesivas temporadas. Quizás fuese el carácter del torero lo que causó tales circunstancias, quizás el torero y su entorno no supieron administrar los triunfos conseguidos y se vieron inmersos en continuas grescas y enfrentamientos con aficionados, compañeros y prensa taurina, alcanzando el punto más lamentable cuando el padre del torero fue condenado en 2001 por agredir a un prestigioso crítico taurino en Logroño durante la feria de San Mateo de 2000. A partir de ese incidente la figura de Abellán pareció entrar en un bucle en el que la prensa le medía cada una de sus actuaciones y la afición, sobre todo la de Madrid, se puso de uñas contra su figura y lo que antes era desparpajo y buen hacer, ahora eran falta de técnica y de oficio.
Pasaban las temporadas y la carrera fulgurante de Miguel Abellán parecía diluirse, cada vez contaba menos para las empresas y sus apariciones en saraos y en prensa del corazón, debido a sus relaciones sentimentales, ocupaban más titulares que su faceta como matador de toros.

En las últimas temporadas parecía que Miguel Abellán quería volver a subirse al tren del que nunca debió bajarse, una faena bordando el natural a un toro de "El Cortijillo" al que pudo desorejar de no fallar con los aceros hacían presagiar que la madurez se había instalado en el alma rebelde de Abellán. En la pasada feria de San Isidro 2011, un toro de La Palmosilla le infirió una aparatosa y grave cornada en la boca, abriéndole el labio, causándole destrozo de varias piezas dentales y un serio traumatismo craneal, fue intervenido con éxito del percance, recuperándose por completo de las lesiones.

El pasado viernes compartía Miguel Abellán cartel en la Feria del Pilar de Zaragoza con Juan José Padilla ante toros de Ana Romero. Se les veía a Abellán y Padilla hablar amigablemente antes del comienzo del festejo sobre "sus cosas". Padilla le hacía gestos y parecía preguntarle sobre la cicatriz que le había dejado la cornada de Madrid y Abellán seguro que le decía a Juan José que ya lo había superado, aunque todos los días se la tuviera que ver reflejada en el espejo.

Antes de salir ese fatídico "Marqués" de Ana Romero, también se les vio debatir en uno de los burladeros de La Misericordia. Después no hace falta repetir lo que sucedió. La siguiente imagen una vez que Padilla entró en la enfermería y se comprobó, gracias a las repeticiones del Plus, la gravedad de la cornada, es la de un torero roto, con la cabeza apoyada en una de las puertas de acceso al ruedo tras acompañar a su compañero en un viaje horroroso e interminable. Miguel Abellán estaba destrozado, el toro había corneado a Padilla, pero Abellán sentía esa cornada en lo más profundo de su alma torera, un alma partida por la mitad, hecha añicos, hecha unos jirones que difícilmente podrán ser reconstruidos. Abellán, como director de lidia, tuvo que matar el toro que hirió a Padilla, pero Abellán llevaba una cornada tan grande y dolorosa como la de su compañero y amigo, una cornada que tardará más en olvidar que la que le produjo la cicatriz que se ve cada mañana.
Al término de la corrida seguía Abellán inmóvil, con los dos antebrazos apoyados en el burladero, la mirada humedecida perdida en el infinito, conteniendo la rabia, impotente ante los designios de una profesión tan bella como cruel en la que se pasa del triunfo a la derrota en milésimas de segundo, en la que un paso mal dado puede suponer la mayor de las desgracias y en la que nunca puedes saber por cual de las puertas saldrás.
Las lágrimas de Abellán dignifican una profesión, la de torero, la de matador de toros, la de torero de plata, picador, mozo de espadas o ayuda, todos a su manera se juegan la vida en una plaza cada tarde de corrida. Las lágrimas de Abellán demuestran que debajo del vestido de torear hay seres humanos que sienten y padecen, que en el toreo no solo cuentan los trofeos, para mí las lágrimas de Abellán suponen un gesto de hombría y torería similar al de cruzar una Puerta Grande. Desde aquí me reencuentro con un torero que no fue santo de mi devoción pero por el que a partir de ahora procesaré una fe especial. Espero que puedas superar los amargos momentos vividos en Zaragoza y superarlos, como estoy seguro que lo hará Padilla, y seguir pisando los ruedos del mundo para que humildes aficionados como yo podamos seguir contando y cantando las grandezas del toreo.

FUERZA ABELLÁN. FUERZA PADILLA.

sábado, 8 de octubre de 2011

NO VALE NADA LA VIDA: ÁNIMO PADILLA



Dice un corrido mexcicano: "No vale nada la vida, la vida no vale nada. Se empieza siempre llorando y así llorando se acaba".
A veces no nos damos cuenta de lo que verdaderamente vale la vida hasta que no la vemos puesta en una balanza, como sucedió ayer con Juan José Padilla, un hombre, un ser racional, una persona humana, cabal y dispuesta. Dispuesta a jugarse su vida, la vida de un hijo, de un esposo, de un padre, que tras la brutal cornada lo primero que se le viene a la mente son sus hijos. Y todo ello sin importarle que en el coso zaragozano de La Misericordia no hubiese ni tres mil personas para ver a tres toreros con mayúsculas, tres profesionales que dignifican su profesión arriesgando su vida, porque ellos y sólo ellos parecen ser conscientes del peligro que eso supone, ellos conviven con sus miedos, con sus angustias y son capaces de convivir con ellos e incluso superarlos para poder enfundarse sus vestidos de torear, hacer el paseíllo, deshacerse de sus oponentes y en alguno de los casos hasta emocionar al respetable.
Fuerza Padilla, el toro te lo ha dado casi todo en esta vida, sería injusto que tu carrera acabase en este punto. Estoy seguro que serás capaz de reponerte, seguro que ese pundonor que demostraste para no esconderte en ese maldito toro y banderillearlo cuando cualquier otro se hubiese quedado tras las tablas y hubiese mandado a la cuadrilla, te sirva para sobreponerte y lo de Zaragoza no sea más que otra muesca en tu cuerpo, labrado a cornadas superadas por la hombría de una clase de hombres para los que la vida es el toreo y el toreo el bien más preciado del mundo.

ÁNIMO PADILLA.

miércoles, 5 de octubre de 2011

DON MARIANO CIFUENTES: CRÓNICA DE UN GANADERO HUMILDE

La foto es de Arse&Azpi: porlasrutasdeltoro.com

Don Mariano Cifuentes es un ganadero humilde y trabajador, enamorado de un encaste, el de "Coquilla”, en 1982 le compró la ganadería a don José Matías Bernardos, "El Raboso" y desde entonces lleva luchando por que no desaparezca dicho encaste del que aunque la prensa no se haga eco tiene la parte más pura. Don Mariano no pasará a la historia por dar vueltas al ruedo de la mano de algún figurilla en alguna plaza de tronío tras indultar uno de sus animales, pero tiene la gallardía de asumir las culpas cuando una novillada como la de Zaragoza no tiene el comportamiento deseado por el ganadero. Estoy seguro que don Mariano y su familia no cesarán en su empeño de seguir peleando por sus "Coquillas" y espero que en el siguiente compromiso sus novillos o sus toros se comporten como sus madres lo hacen en los tentaderos de Encina Hermosa.
Don Mariano Cifuentes es un ganadero humilde y trabajador, enamorado de un encaste, el de "Coquilla”, en 1982 le compró la ganadería a don José Matías Bernardos, "El Raboso" y desde entonces lleva luchando por que no desaparezca dicho encaste del que aunque la prensa no se haga eco tiene la parte más pura. Don Mariano no pasará a la historia por dar vueltas al ruedo de la mano de algún figurilla en alguna plaza de tronío tras indultar uno de sus animales, pero tiene la gallardía de asumir las culpas cuando una novillada como la de Zaragoza no tiene el comportamiento deseado por el ganadero. Estoy seguro que don Mariano y su familia no cesarán en su empeño de seguir peleando por sus "Coquillas" y espero que en el siguiente compromiso sus novillos o sus toros se comporten como sus madres lo hacen en los tentaderos de Encina Hermosa.

CRÓNICA DE LA NOVILLADA DE ZARAGOZA ESCRITA POR DON MARIANO CIFUENTES


No se pueden imaginar con la ilusión que sigue un ganadero la cría de un novillo, y cuando un día conoces en que plaza se lidiará, desde ese momento cuantas meses, días y horas con la esperanza siempre que su lidia engrandecerá tu ganadería reconfortando a su vez, el ánimo del ganadero tan maltrecho por los inmensos sinsabores en el seguimiento de la misma.
Pues bien con esa ilusión fuí a Zaragoza el día 23 de Septiembre esperando conseguir lo enumerado. Por la tarde visité los corrales de " La Misericordia " comprobando el estado de los novillos y con la mirada puesta en las 6 de la tarde del día siguiente.
Por parte de los aficionados existía ilusión de ver, aún en la de sin caballos, el escaseado encaste COQUILLA.

Les quiero contar en el blog el resultado de la novillada. Fue un comportamiento anormal el que tuvo, menos mal que és la primera vez que me sucede algo así, llevo veintinueve años criando este encaste y lidiando, y la verdad he recibido muchas satisfacciones del mismo, de lo contrario no me veo cumpliendo con este cometido. Quizás era tanta la ilusión del ganadero y de los aficionados que se produjo la decepción en mayor escala.

Saliendo al paso de lo que se ha publicado estos días les aclaro, que compré la ganadería a José Matías Bernardos " El Raboso ", vacas y sementales, en Agosto de 1982.
Se dice también que al lidiar tan poco o prácticamente nada razón por la cual la ganadería está asilvestrada por falta de selección.
Les puedo decir como contestación a estos comentarios que lidio una media de cincuenta novillos anuales.
Mis tentaderos son de unas cincuenta vacas por año.

El primer decepcionado con el juego en conjunto de la novillada fue el propio ganadero que para nada se lo esperaba así.
La cogida de Carlos Ojeda se produjo al intentar parar a su primer novillo, segundo en el órden de lidia, perdió el equilibrio cayendo al suelo donse el novillo le alcanzó en la zona escrotal, quiza la cogida tuvo efecto en el titulo de las crónicas aparecidas :
Carlos Ojeda herido en una dura y difícil novillada de COQUILLA.
Difícil novillada de Mariano Cifuentes.
¿ Media Casta o Casta Entera ?
Como ganadero del festejo no quiero eludir mi resposabilidad ni trato de quitármela en ningún momento, pero como tengo el vídeo lo que les pongo a continuación se ve claramente en el mismo.
Estoy totalmente de acuerdo en que son novilleros y que estan aprendiendo el oficio, pero sus mentores desde el callejón les pueden dirigir acertadamente.
A varios novillos cuando ellos creían que no se arrancaban lo hubieran conseguido llevando la muleta al hocico y cruzandose más, son peculiaridades del encaste.
No se dio sitio a los novillos, ¡ Ay si al quinto novillo se le hubieran perdido pasos!
El encaste Santa Coloma pide sitio no admite que se esté encima de ellos.
Alargar las embestidas, no cortarlas.
Los novillos no rompieron debidamente de salida porque no los paraban, los llamaban de burladero en burladero.
Algunos novillos pedían otros terrenos y no se los cambiaron.
Para mí gusto el mejor novillo el sexto, el de la jota se fue sin verlo, porque en ningún momento se le hicieron las cosas bien, a pesar de cortarle la oreja.
El toro de Santa Coloma, no admite de medias tintas, ni titubeos ni enmiendas, para torearlo bien la firmeza tiene que estar presente en el superlativo máximo.
Todo esto hace que el resultado de la novillada se complicara, que bajara más el nivel, sin el segundo novillo el garbanzo negro, la misma se hubiera visto de otra manera.
No se puede banderillear como lo estuvieron haciendo toda la tarde.

Si llevo tantos años luchando por este encaste, en quien nadie confía y todos abandonan, es porque tengo plena seguridad en él a pesar de la decepción de Zaragoza.
Por tanto, repito, que asumo mi responsabilidad pero quiero compartirla con los que no hicieron posible que los problemas que tuvieran los novillos se resolvieran, como ¡ Lidiándolos !
Todo toro, grande o chico, malo o bueno, manso o bravo, tiene su lidia, debe lidiarse, la suya, pero la tiene y hay que darsela.
Por último y para terminar creo que los que alguna vez, han sido espectadores tanto en plazas como en tentaderos tendrán claro que en Encina Hermosa tenemos Casta Entera.

domingo, 2 de octubre de 2011

FERNANDO ADRIÁN Y BALTASAR IBÁN: ZAPATO DE ORO E INDULTO

Foto Burladero.com

Estaba a puntito de saltar al ruedo el último novillo de la feria y el Zapato de Oro se lo estaban a punto de calzar Conchi Ríos ó Alberto López Simón, que habían cortado dos orejas cada uno, la murciana ante astados de Valdefresno y el segoviano frente a novillos de Pedraza de Yeltes, los jurados hubiesen tenido que hilar fino para dilucidar el ganador de tan prestigioso galardón, pero la mejor feria de novilladas del planeta, nos tenía guardada una sorpresa impensable. Al ruedo del Arnedo Arena salió Santanero, novillo negro de capa, herrado con el número 36 nacido en octubre de 2007, largo, serio de cara y bien rematado. No paró de embestir desde que salió de chiqueros hasta que volvió a los mismos, recibió un puyazo largo, arrancándose de lejos, empujando abajo y metiendo los riñones, se arrancó a por la muleta en un inicio por cambiados desde el centro del anillo y continuó buscando sin descanso la muleta de Fernando Adrián que lo templó con la derecha en tandas de mucha emoción. Por el pitón izquierdo Santanero embestía con más calidad y codicia y el novillero madrileño lo toreó con gusto con la muleta barriendo el albero. Volvió al pitón derecho y el de Baltasar Ibán seguía en su empeño de perseguir los engaños con codicia y bravura hasta tal punto que la afición arnedana, rota de entusiasmo, comenzó a pedir el perdón para el novillo, siguió Adrián mientras la presidencia dilucidaba sobre el indulto y el novillo a lo suyo cada vez a más. Por fin del palco del Arnedo Arena salió el pañuelo naranja que otorgaba el indulto a Santanero, un novillo bravo que le puso a Fernando Adrián el Zapato de Oro en las manos y a los que la sabia afición de Arnedo mantendrá en su recuerdo, como mantiene las míticas faenas de Morante, Javier Conde, Diego Urdiales o los novillos de Cebada Gago, Fuente Ymbro, Prieto de la Cal, La Quinta o Cortijoliva que en días lejanos se llevaron la gloria de la Ciudad del Calzado y entraron en la historia taurina de Arnedo y su Zapato de Oro.

- XXXVIII trofeo Zapato de Oro
FERNANDO ADRIÁN

-Ganadería más completa
BALTASAR IBÁN

-MEJOR ESTOCADA
CONCHI RÍOS

-Mejor par de banderillas
RAUL ADRADA

-Mejor puyazo
IVÁN GARCÍA

-Novillo más bravo
Nº36 SANTANERO

-Mejor toreo de capa
SERGIO FLORES

PRIETO DE LA CAL DECEPCIONA EN ARNEDO


Los Veragua de Prieto de La Cal no cumplieron con las amplias expectativas que habían creado desde que ayá por el mes de enero se anunció su presencia en el ciclo zapateril. Los deseos y las ansias de ver como los jaboneros de La Ruiza desparramaban su casta por el Arnedo Arena se fueron esfumando a medida que saltaban al ruedo los bonitos y musculados novillos de don Tomás Prieto. Salvo excepciones como los dos primeros y el cuarto, que sin ser un dechado de virtudes si que tuvieron su emoción y su lidia, pero que ni Alberto Durán ni Emilio Huertas ni Javier Jiménez, supieron dárselas, quizás más sugestionados por el hierro de sus oponentes que por sus verdaderas condiciones. El resto del festejo transcurrió bajo la pesadumbre y sosería de unos novillos de los que se esperaba un comportamiento totalmente contrario al que desarrollaron. No fue lo que se esperaba pero si a alguien se le puede perdonar semejante fiasco es a la divisa onubense que lleva décadas luchando por la conservación de un encaste único sin importarle otra cosa que criar sus reses con la decencia y dignidad que en su día representó el oficio de ganadero de bravo.

sábado, 1 de octubre de 2011

LÓPEZ SIMÓN, A PUNTO DE CAMBIAR LA HISTORIA

Existe en Arnedo una especie de maleficio por el cual los novilleros que actúan en su feria tras haber ganado con anterioridad el Zapato de Oro, nunca llegan a triunfar. Tal circunstancia se viene dando a lo largo de sus treinta y ocho ediciones sin que ningún aspirante haya logrado ni siquiera un ligero triunfo que refrendase lo que un día hizo que la afición de Arnedo le premiase con tan preciado galardón. Pero ayer Alberto López Simón demostró que le tiene cogida la medida al nuevo Arnedo Arena. El pasado año hizo historia, siendo el primer novillero en conseguir el Zapato de Plata y el de Oro en una misma temporada. Y este año, en el que se le aprecia al novillero con más oficio, de nuevo quiere romper las estadísticas ya que ayer cortó dos orejas a un buen novillo de Pedraza de Yeltes al que también se le premió con la vuelta al ruedo y se coloca junto a Conchi Ríos como candidato a calzarse el par.

A mí personalmente me parecieron excesivos ambos trofeos, tanto a novillo como a novillero. López Simón volvió a ejecutar la faena tipo con la que conquistó anteriores Zapatos. Comienzo en el centro del anillo con pases cambiados, muy tieso y estirado, luego derechazos con gusto aprovechando el viaje del novillo, sin tirar demasiado de él y a media altura. Algún rodillazo entre serie y serie y algún remate sacándose al toro por la espalda que puso el ¡ay! en los tendidos. Pasó a la mano izquierda y los muletazos brotaron con más naturalidad y más hondura, terminó la faena con un abanico de recursos, circulares, espaldinas y demás adornos que hicieron estallar los tendidos de sol por donde transcurrió la faena del segoviano. Intentó matar recibiendo cobrando un metisaca, volvió a entrar, esta vez al volapié dejando una estocada entera. El público pidió las orejas y la presidencia se las otorgó, así como la vuelta al ruedo al de Pedraza. Primeramente había pasaportado Simón un novillo de escasa fuerza pero de gran presencia al que recibió con media docena de redondos ambas rodillas en tierra. Ya de pie no fue capaz de someter al animal en las primeras series hasta tal punto que el novillo se lo echó a los lomos en un remate por el izquierdo. Destacó en una serie por el derecho, al natural quedó inédito, en la que fue capaz de meter al novillo en la muleta y a partir de ahí el astado empezó a protestar y a cortar el viaje. Mató de media y estocada entera.

No otorgó la presidencia trofeo alguno a Sergio Flores por su labor en el que abría plaza, un novillo enorme de hechuras con el que el mexicano se gustó a la verónica. Quitó por chicuelinas ajustadas. El novillo resultó todo fachada, muy noble pero con escasa fuerza para mover su esqueleto. Flores lo templó a media altura en series limpias y bien rematadas. Mató de estocada eficaz pero pescuecera, parte del público pidió el trofeo pero el palco se lo denegó. Su segundo también flojo de los cuartos traseros, embistió con codicia en las primeras series, hubo una buena por el derecho, dejando siempre puesta la pañosa, pero el toro empezó a buscar las querencias de tablas y Flores no fue capaz de sujetarlo en los medios.

Luis Gerpe ilusionó al respetable en un inicio de faena a su primero con unos ayudados por bajo muy toreros, pero después no supo cogerle la distancia ni el temple al de Pedraza. Con el que cerraba plaza volvió a evidenciar las mismas carencias que en el anterior y su paso por Arnedo quedó silenciado.


FOTO DE I. J. DEL PINO: BLOG "EL MONOSABIO"
donde se detalla el porqué de la vuelta al ruedo al 5ºnovillo.